Páginas

jueves, 3 de enero de 2019

Nuevo drone británico "más furtivo"

Nuevo dron sin superficies móviles de control

El MAGMA de BAE Systems puede derivar en aviones de combate mucho más furtivos [stealth] 






David Axe | War is Boring
 
Investigadores de BAE Systems y la Universidad de Manchester probaron con éxito un vehículo aéreo no tripulado experimental sin superficies móviles de control, según informó BAE Systems en diciembre de 2017.

El dron a reacción MAGMA, con una envergadura de 3’5 metros, puede ayudar a BAE en el desarrollo de aviones de combate más furtivos [stealth]. Las superficies de control representan gran parte de la firma de radar de una aeronave.

En lugar de timones, alerones y otras superficies convencionales de control, el MAGMA se sirve de dos nuevas tecnologías para maniobrar. La tecnología control de circulación del ala [wing circulation control] «saca aire del motor de la aeronave y lo impulsa a velocidad supersónica por el borde posterior del ala para controlar la aeronave», en palabras de BAE Systems.

Al mismo tiempo, la tecnología vectorización de empuje por fluidos [fluidic thrust vectoring] «utiliza aire impulsado para desviar los gases de escape y así poder cambiar la dirección de la aeronave».

«Estas pruebas constituyen un importante paso al frente en nuestros esfuerzos por estudiar fuselajes adaptables», dijo Bill Crowther, jefe del proyecto MAGMA en la Universidad de Manchester, en un comunicado de BAE Systems. «Lo que pretendemos conseguir con este programa es realmente innovador».

En su primer vuelo el MAGMA llevaba dos pequeñas aletas verticales para estabilización. Pero puede que las aletas, que por sí solas constituyen una fuente importante de reflexión radar, sean algo temporal. «Durante los próximos meses está previsto realizar más pruebas para comprobar que las nuevas tecnologías de control de vuelo pueden cumplir con el objetivo final de que la aeronave vuele sin ninguna aleta o superficie móvil de control», declaró BAE Systems.

El vuelo del MAGMA no es la primera vez que BAE Systems prueba un UAV sin superficies móviles de control. En 2010, la empresa ─junto con la Universidad de Cranfield─ probó el más pequeño dron Demon, que también utilizaba aire impulsado para maniobrar. El Demon fue el resultado de un proyecto de investigación de cinco años y 8 millones de dólares que BAE Systems lanzó en 2005. El MAGMA supone la continuación de ese proyecto.

Los ingenieros aeronáuticos llevan mucho tiempo queriendo eliminar las superficies móviles de control de una aeronave. Las superficies móviles de control de una aeronave no solo aumentan la sección transversal de radar de la aeronave, o RCS [Radar Cross-Section], sino que también pesan y son caras y difíciles de fabricar.

En 1975, John Kelly ─ingeniero de Boeing─ identificó las superficies móviles de control como un gran impedimento a la hora de desarrollar aviones de combate furtivos. «Para lograr diseños con una reducida RCS hay que barajar la posibilidad de eliminar las superficies móviles de control», escribió Kelly en un estudio de la empresa.

Kelly comparó un modelo de fuselaje liso con uno con superficies móviles de control. El fuselaje liso arrojó una sección transversal de radar de tan solo 0’1 metros cuadrados. Por el contrario, el fuselaje con superficies móviles de control presentó una sección transversal de radar de hasta 0’5 metros cuadrados.

Los sistemas de control de vuelo de los actuales aviones furtivos de combate ─que incluyen el B-2, el F-22 y el F-35─, supuestamente cuentan con modos de baja visibilidad que limitan los movimientos de las superficies de control para minimizar la reflexión radar. Puede que BAE Systems esté trabajando en el MAGMA para encontrar diseños de aeronaves con menos o ninguna superficie móvil ─y por tanto mucho más furtivos─.

Traducido por Jorge Tierno Rey, autor de El Blog de Tiro Táctico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario